domingo, 13 de junio de 2010

La búsqueda del camino


Odio estos días en los que una se siente perdida, sin rumbo. Llueve y no veo nada, ni dentro de mí, ni fuera. La sensación de fracaso y de vergüenza se apodera de mi mente. Quiero hacer tantas cosas y no logro hacer ninguna satisfactoriamente. No me salen los dibujos, la poesía no logra sacudirme, el sol no sale de entre las nubes...solo me quedaba intentar hacer un blog. Un blog que espero mantener en el tiempo, en el que no sé que es lo que voy a escribir, supongo que nada interesante. No tengo ningún tema fijo del que hablar, ninguna causa que defender con suficientes argumentos ni ninguna virtud con la que pueda obsequiar al mundo. Lo único que deseo es aprender y conseguir ubicarme en el camino de mi vida, y hay días como este en el que hasta el hecho de estudiar se me hace insoportable, igual es cosa de voluntad.

Quizá el blog sea una manera de conseguir abrir alguna puerta, algún consuelo para que esas palabras que necesito expresar sin encontrar nunca la persona adecuada, tengan la esperanza de causar algo en alguien, de volar a otros y no quedarse en simples borradores que acabaran en la basura. Igual en un futuro, cuando lea mis reflexiones, me sienta como esa niña que leía las páginas antaño escritas en su diario y me suma en una vergüenza parecida a la de escuchar la voz de uno mismo en una grabadora.

1 comentario:

  1. Abro esta windanilla
    que entre el fresco
    trayendo brisas
    acunando musicas ...

    Camaron, Lucia,
    ay como lagua
    entre dos aguas ...

    Aire hurgando hondo
    que mana y brota
    de dulce Paz Interior

    noche y dia
    tarde tarde
    ...

    ResponderEliminar