
si se lucha a contracorriente,
no puede volverse frío,
lo que siempre ha sido caliente.
El hierro de moldea,
al son de las brasas ardientes,
y las flores bailotean,
cuando les da el aire de frente.
Un día le dije a mi máma:,
"yo no quiero sentirlo tanto",
y ella me contestó:,
"¿por qué?, hija, eso nunca es malo".
Yo la volví a replicar:,
"que esta vida así no la aguanto"
Pero ella me confesó:,
"que el río siempre encuenta su llano".
Querer no es poder,
si se lucha a contracorriente...
El hierro se moldea,
al son de las brasas ardientes...
Afronta lo que tú eres,
y utiliza tus bellas armas,
no quieras se como el fuego,
si mojas parecido al agua.
Que para llegar a Roma,
existen sin fin de caminos,
y todos son tan posibles,
como también lo son de lindos.
Querer no es poder,
si se lucha a contracorriente,
amigo, no seas latón,
si el sentir es efervescente.
El hierro se moldea,
al son de las brasas ardientes,
fluye, niño, que acabarás,
sino, enfermándote esa mente.